La autoridad regional mostró su preocupación por la seguidilla de ataques contra infraestructura forestal y solicitó al Gobierno medidas inmediatas para evitar una tragedia similar a la del verano de 2023.

En un contexto de creciente preocupación por la seguridad y el riesgo de incendios en la Región del Biobío, el Gobernador Rodrigo Díaz denunció una serie de atentados que han afectado la infraestructura clave para la prevención y detección de incendios en la provincia de Concepción.

La autoridad regional expresó: “Hace tres días atrás se voló en la comuna de Florida una torre de protección y detección de incendios”, un hecho que pone en grave peligro a la población en los meses más críticos del año. La magnitud de los daños no se limita a Florida, ya que “anoche hubo también problemas en el límite de la comuna de Florida y Yumbel, dentro de la provincia de Concepción, donde se dañaron equipos repetidores que sirven para detectar incendios y para manifestar alarma”, enfatizó.

Agregó que es importante denunciar y poner en la agenda pública la seguidilla de ataques, calificando estos hechos como de “la mayor peligrosidad” debido al contexto climático. “Hemos tenido un invierno muy lluvioso, un invierno que ha permitido que los pastos estén largos”, explicó, subrayando que esto aumenta considerablemente el riesgo de incendios durante el verano. Asimismo, “por distintas razones se ha hecho difícil en el marco de los planes de descontaminación vigentes poder reducir la masa de pastos que ponen peligro a la población en los veranos”, agregó.

En ese sentido, Díaz realizó un llamado urgente a las autoridades nacionales. “Le hago una petición con mucha fuerza y con mucha energía al Gobierno, al Ministerio del Interior en particular, de que tome las medidas de resguardo y se hagan los patrullajes para evitar el robo de cables, la destrucción de torres de detección de incendios y todo aquello que pareciera que está apuntando a dejar ciego al sistema de protección con que cuenta la población para evitar que los incendios, una vez que se propaguen, puedan afectar a la gente”, sentenció.

“Sabemos lo que nos pasó el verano del año 2023, en febrero, más de una decena de personas muertas en la región, más de 200.000 hectáreas destruidas, más de un millar de casas perdidas, cientos de miles de especies tanto de flora y fauna quemadas, la contaminación que se generó fue salvaje”, lamentó.

En su contundente llamado, el gobernador concluyó: “Hago esta denuncia con toda responsabilidad, está apareciendo un riesgo y no puede quedar ciego ante nuestros ojos”.

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